Qué es la torsión ovárica?
La torsión ovárica es una condición poco común pero grave en la que el ovario y partes de la trompa de Falopio se retuercen alrededor de los ligamentos que los sostienen, lo que puede cortar el suministro de sangre a estos órganos. Si el flujo sanguíneo se restringe durante demasiado tiempo, el tejido ovárico puede morir, lo que puede afectar la fertilidad.
Causas de la torsión ovárica
La causa principal de la torsión ovárica es la presencia de un quiste o masa en el ovario. Más del 80% de los casos de torsión ovárica ocurren en pacientes con masas ováricas de 5 cm o más grandes. Las mujeres que se someten a tecnologías de reproducción asistida también tienen un mayor riesgo de desarrollar torsión ovárica.
Aproximadamente el 20% de los casos de torsión ovárica ocurren durante el embarazo, a menudo debido a un quiste de cuerpo lúteo o a tejidos circundantes más laxos.
Síntomas de la torsión ovárica
Los síntomas de la torsión ovárica incluyen:
• Dolor intenso en la parte baja del abdomen o la pelvis
• Calambres
• Náuseas
• Vómitos
• Fiebre
Cuándo buscar atención médica
Si experimentas alguno de estos síntomas, es crucial buscar atención médica de inmediato. El diagnóstico y tratamiento rápidos son necesarios para desenrollar el ovario y prevenir la muerte del tejido.
Cómo se diagnostica la torsión ovárica?
El diagnóstico de la torsión ovárica se basa en una combinación de síntomas, examen físico y una ecografía transvaginal.
Tratamiento de la torsión ovárica
El único tratamiento para la torsión ovárica es la cirugía de emergencia, cuyo objetivo es desenrollar el ovario para restaurar el flujo sanguíneo. Si el suministro de sangre ha sido cortado lo suficiente como para causar la muerte del tejido, puede ser necesario extirpar el ovario. Las opciones quirúrgicas incluyen la laparoscopia y la laparotomía, dependiendo de la gravedad de la condición.
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